La idea de educación se ha
acabado reduciendo a la de enseñanza y ésta a las de instrucción centrada en
conocimientos.
Parte
del discurrir de la vida escolar esta en una tensión permanente entre lo que esta
naturalizado, perdura, subsiste y la
ruptura. Entre lo que la escuela produce y reproduce pero en general la tensión
es forjada por discusiones estériles que no generan cambios profundos.
No
es lo mismo enseñar que habilitar un proceso didáctico,
los jóvenes tienen una habilidad exponencial de desarrollar conocimientos, el
docente le permite formar en la lógica
de aprender a pensar la disciplina, ¿pero es esto lo único para lo que debemos preparar a los
alumnos de este siglo XXI? ¿Cuál es el lugar de la educación en esta
sociedad?¿solo conocimientos desprovistos de una proyección hacia el futuro?
Hay
que modificar la matriz reproductora de contenidos, la relevancia de los
contenidos cambio, hoy pasa por otro lado. Vamos hacia el futuro de la escuela
secundaria con lo mejor de la escuela Tradicional, de la escuela que nosotros cursamos, los
mismos contenidos, con algunos agregados para seguir haciendo como siiiii cambiaramos algo.
Pasa
el tiempo y el curriculum permanece inmutable ¿Necesitamos un curriculum en
acción? ¿Quién cambia? Yo lo di,……lo enseñé……no sé que pasa, no lo aprendió….dalo
de otra forma. La educación nos permite
para un mismo contenido innumerable recorridos, solo depende de nuestra propia
flexibilidad para hacerla más interesante
Hoy
los chicos son multitareas, aprovechemos esas habilidades, debemos y tenemos la
obligación de enseñar, cuando no se enseña se le indica a los jóvenes el lugar
que ocupan en el mundo y para eso no necesitan docentes, debo encontrar mi
lógica docente ¿Está en mi? . Enseño como veo el mundo, de esa manera es como damos la disciplina .
Como dice Martín M. Gordillo “Unas instituciones
que, habiendo sido creadas en un paradigma narrativo-contemplativo, deben contribuir
a la educación de los ciudadanos en entornos dialógico-participativos”. Las
aulas han dejado de ser claustros cerrados, las jaulas se han abierto, se han
transformado en laboratorios para el
aprendizaje de la convivencia social en el momento que le toca vivir.
Educarse no supone sólo
absorber las claves de la cultura e incorporarse a la sociedad a la que uno
pertenece, sino integrarse en ella teniendo algo nuevo que aportar (Martín Gordillo, 2006).Esto que
expresa Martín de manera tan clara sintetiza el papel desde donde nos tenemos
que parar los docentes en este nuevo paradigma.